Arzúa y Melide, el corazón agrario y gastronómico de Galicia

La Ruta Jacobea marca el carácter de las comarcas de Arzúa y Melide. El Camino Francés, el recorrido más popular entre los peregrinos que viajan a Santiago, en el que confluyen a su vez otras sendas menos utilizadas, atraviesa estas tierras llenas de arte, naturaleza y posibilidades para la organización de reuniones y viajes de incentivo.

Los ayuntamientos de Melide, Santiso, Sobrado y Toques forman la comarca de la Terra de Melide. La capital comarcal dispone de un centro multiusos capaz de acoger reuniones de varias dimensiones y de hoteles (como el Lux) vinculados al Camino y al turismo rural. La localidad ha crecido en torno a la Ruta (justo a su entrada se encuentra el singular puente y conjunto urbano de Furelos) y conserva un pequeño casco histórico que refleja su importancia como centro económico de la comarca. Entre sus piezas más relevantes se encuentra un cruceiro gótico que saluda a los peregrinos desde el siglo XIV. Melide es conocida por los caminantes por su gastronomía: sólo en esta localidad se elaboran postres como los ricos (con base de manteca) o los melindres de almendra, y algunas de las pulperías más afamadas de Galicia (caso del restaurante Ezequiel) se encuentran en su casco urbano, sin olvidar que esta es una de las zonas clave para la producción de la carne de Ternera Gallega.

Viajes de experiencia

Un viaje de experiencia a esta zona de la provincia de A Coruña no puede obviar el monasterio de Santa María de Sobrado dos Monxes. Fundado en el siglo X y de traza mayoritariamente barroca, el imponente cenobio da fe de la riqueza que amasó durante siglos, en los que era uno de los mayores terratenientes de toda Galicia. En la actualidad ofrece visitas guiadas a grupos por buena parte de su estructura, y acoge conciertos y actividades singulares con sus claustros como telón de fondo. En Sobrado se encuentra también el poblado romano de A Ciadella, que se puede visitar para conocer cómo vivía toda una división de infantería imperial de la época imperial. El patrimonio histórico de las Terras de Melide es, como se ve, muy anterior a la Edad Media. Otro ejemplo es la iglesia de San Antolín, en Toques, de origen prerrománico y enclavada en un espeso bosque de ribera.

Sobrado también es un municipio repleto de patrimonio natural. Su laguna y los humedales que la rodean son ideales para organizar una salida para la observación de aves, y el punto de partida de numerosas rutas por la Reserva de la Biosfera Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo, el río que nace en también muy interesante la sierra de O Careón.

Conocer los recursos gastronómicos

La otra gran localidad de esta zona interior de A Coruña es Arzúa, cabecera de la comarca a la que da nombre y de la que también forman parte los municipios de Boimorto, O Pino y Touro. Este territorio es un paraíso para los amantes de la gastronomía. El queso con denominación de origen Arzúa-Ulloa es todo un tesoro nacional: en la zona hai numerosas queserías (por ejemplo Queixería Barral) que organizan visitas guiadas para conocer cómo se hace para transformar la leche de vaca de pastoreo en una pasta suave, ligeramente ácida y muy sabrosa. El queso combina muy bien con la miel local, cuya producción también se puede observar gracias a apicultores como O Enredo do Abelleiro, que muestran a los visitantes los secretos de su trabajo.

Estas visitas complementan muy bien cualquier evento que se organice en la zona, bien preparada para acoger eventos de distintas dimensiones. Arzúa cuenta con el gran recinto feiral Terra do Queixo, que cada año acoge la feria de exaltación de este producto; de un Centro Multiusos; y de espacios privados para reuniones en establecimientos como los pazos de Santa María, Sedor y Brandeso, y el de Andeade, ya en Touro. La importancia del Camino de Santiago para la economía local se refleja también en una buena capacidad hotelera: en Arzúa hay numerosos hoteles que pueden alojar a los asistentes a un evento, como el 1930 Boutique Hotel, la Aldea Rural A Painza o los pazos anteriormente mencionados. Comer productos locales también es toda una experiencia, y esto se puede hacer en establecimientos de gran calidad como Casa Teodora, Casa Chelo, Casa Nené, Fonte do Picho o Casa Brandariz.

La comarca de Arzúa se conoce mejor andando. Recorrer una parte del Camino de Santiago, visitar conjuntos históricos singulares como el del puente de Ribadiso o conocer alguna de las cascadas que adornan sus ríos o los de los ayuntamientos encuadrados en esta división territorial es una experiencia refrescante para complementar una reunión científica o empresarial.